El concepto de ansiedad se ha vuelto tan “famoso” en esta época, que me parece importante explicar qué es la ansiedad y hacer énfasis en la importancia de la terapia psicológica.
Si piensas que esto afecta tu estado de animo, tus relaciones personales y tu bienestar, busca ayuda profesional.
El miedo es diferente de la ansiedad
Para comenzar, debemos diferenciar el miedo de la ansiedad. Ya que el miedo, es un estado neurofisiológico que nos informa peligro real frente a una situación.
Por ejemplo: tienes miedo de alguien que te está apuntando con un arma o ves a un león hambriento muy cerca de ti.
Si te fijas en los ejemplos, el miedo cumple una función muy importante de superviviencia para el ser humano. Nos permite predecir y alejarnos de cosas que ponen en riesgo nuestra vida, también nos ayuda a tomar decisiones de lo que nos beneficia y muchas cosas más.
En cambio, la ansiedad es una respuesta conductual, fisiológica, afectiva y cognitiva que se activa por anticipar situaciones que se consideran peligrosas e incontrolables y que ponen en riesgo los intereses del individuo (Beck, 2013).
Por ejemplo: sientes ansiedad por una entrevista de trabajo, por eso llevas 2 noches sin dormir, te duele el estomago y piensas que no podrás responder bien lo que te pregunten.
¿Es normal sentir ansiedad?
A todos los seres humanos les pasa de sentir ansiedad en ciertos momentos de su vida. Sin embargo, hay una parte de personas que la mayoría del tiempo, sienten y experimentan malestar por anticiparse de manera negativa ante situaciones que no están en su control.
Se podría escuchar a alguien con ansiedad diciendo lo siguiente:
- “Pienso que me voy a quedar bloqueado y se me nubla la vista”
- “Llevo 8 días practicando la conversación para no fallar y que todo salga mal”
- “Hace 3 días no dejo de pensar en lo que va a pasar y me duele la cabeza”
- “No quiero exponer porque se van a burlar de mí”
- “Quiero vomitar cuando pienso en ir a la universidad”
- “Prefiero no dar mi opinión porque se me pone la cara roja y me da pena”
Este tipo de pensamientos y sentimientos, hacen que la persona deje de disfrutar y vivir con plenitud. Interfiriendo en su rutina normal, sus ocupaciones laborales/académicas, sus relaciones interpersonales y vida social.
Aquí en este punto, es necesario recordar que si estás pasando por un episodio o piensas que tienes ansiedad. ¡Busca ayuda! No eres el primero ni el ultimo y es algo que se ha estudiado durante mucho tiempo y tiene solución.
Síntomas comunes de la ansiedad clínica
La ansiedad se puede ver de muchas formas y va a depender de cada persona. Por eso no se debe generalizar y un especialista será la persona encargada de dar un diagnostico.
Algunos de los síntomas comunes son:
Síntomas fisiológicos
- Aumento del ritmo cardiaco
- Respiración acelerada
- Mareo
- Sudoración
- Temblor de brazos o piernas
- Debilidad
- Sequedad de boca
Síntomas cognitivos
- Miedo a perder el control
- Miedo a la evaluación negativa de los demás
- Perdida de objetividad
- Miedo al daño físico o a la muerte
Síntomas conductuales
- Huir, alejarse
- Inquietud
- Quedarse paralizado
- Dificultad para hablar
Síntomas afectivos
- Nervioso
- Asustado
- Impaciente
- Frustrado
Como lo mencioné anteriormente, el diagnóstico no solo es identificar los síntomas. Se debe hacer una evaluación completa del tipo, frecuencia y gravedad. Por eso es tan importante ¡siempre acudir con un profesional!
¿La ansiedad tiene solución?
¡Sí! Hay muchas personas que lo padecen y lo trabajan en terapia psicológica. También hay personas que necesitan ir al psiquiatra para comenzar a tratar la ansiedad y algunos lo manejan con medicamentos. Sin embargo, la terapia psicológica es indispensable.
¿En cuánto tiempo se cura la ansiedad?
¡Esa pregunta es una de las más frecuentes! Solamente te puedo decir que depende de cada persona. Hay tratamientos que se demoran entre 2 a 3 meses y otros que podrían tardar 1 año o más. Además, la ansiedad no debe verse como algo que se quita y nunca vuelve. El terapeuta encargado de manejar el caso, te dará herramientas y te enseñará a manejarla para que no afecte de manera significativa tu bienestar.
Recuerda, todos sentimos ansiedad en algunos momentos de nuestra vida. El problema viene cuando la ansiedad se mantiene por largos periodos de tiempo e interrumpe tu bienestar.
Espero que está información sea útil. Si piensas que le podría servir a alguien no dudes en compartirla.
Referencias bibliográficas:
Beck, A. T. (2013). Terapia cognitiva para trastornos de ansiedad. Descleé de Brouwer.
Lazarus, S. & Folkman, S. (1986). Estrés y procesos cognitivos. Barcelona: Martínez Roca.